fallingwater house

Es muy difícil que alguien, aun siendo un profano en arquitectura, no haya visto alguna imagen de la famosa Casa de la Cascada o Fallingwater House. Tras salir en la portada de la revista Time en 1938, se convirtió en icono mundial y uno de los principales hitos de la arquitectura del siglo XX. Se considera “la residencia más famosa que se haya construido”.

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Vista general desde el arroyo

Se diseñó en 1935 por el afamado arquitecto estadounidense Frank Lloyd Wright (1867-1959), como residencia de verano de la familia Kaufmann. Esta extraordinaria vivienda se sitúa en Pensilvania, y está levantada literalmente sobre la cascada de un arroyo en un bosque salvaje de Bear Run.

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Frank Lloyd Wright | Planos originales del proyecto

El diseño de la casa Kaufmann es una clara muestra de arquitectura naturalista, pues se construyó  pensando en  integrar la edificación con el paisaje, convirtiéndola en un elemento en plena armonía con el entorno. La admiración de Wright hacia la arquitectura japonesa fue la clave del proyecto, pensado para que siempre se sintiera la fuerza del agua escuchándose en toda la casa.

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Fachada principal con «escalera del agua» | Fachada posterior

La casa se compone de tres niveles que se asientan directamente sobre las propias rocas del lugar, asomándose alguna de ellas junto a la chimenea, eje vertical y corazón de la casa. El espacio interior es amplio y libre con grandes ventanales que se extienden formando las esquinas. La “escalera del agua”, baja desde el interior a una pequeña plataforma que está junto al río.

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Planos de planta

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Interior de la vivienda | Salón y Chimenea

La casa crece de dentro a fuera mediante imponentes voladizos que componen las terrazas que vuelcan a la cascada. El hormigón empleado en los voladizos contrasta con la piedra de las fachadas, destacando la horizontalidad del proyecto.

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Voladizos de hormigón

Hoy en día Fallingwater House es un monumento que pocas arquitecturas contemporáneas han podido superar, pues como el mismo Wright dijo: “El arquitecto debe ser un profeta…si no puede ver por lo menos diez años hacia delante no lo llames arquitecto”

Fuente: Fallingwater.org

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